Posiblemente JR tu problema no son tus circunstancias adversas que indicas,
sino la falta de inteligencia para saber adaptarte a las circunstancias. Yo me
he adaptado a mi soledad eterna de forma que esa soledad se convirtiera en mi
mayor felicidad. Esto no es autoengaño, no es ir a ver una película horrenda y
decir que no esta tan mal. Es ir a ver la misma película horrenda y disfrutar de
ella, y reírse a carcajadas, reales no fingidas.
Creo que vivir en Madrid te conducirá a una situación de desánimo mayor
que si vivieras apartado de esa ciudad. El ir y venir de gente con la que te
cruzas, sin nada de comunicación, creo que aumenta la sensación de soledad. A mí
me gusta de vez en cuando ir a una ciudad grande, para ver ese juego de
abarrotamiento y soledad al mismo tiempo. Pero cuando llego a mi espacio
aislado, de verdad que no encuentro otro sitio mejor para sentirme realmente
bien.
De ti, lo que más me decepciona es tu poca inteligencia para no encontrar
tu felicidad, con excusas simples como la decepción en el prójimo. Ya va siendo
hora de que aprendas que la felicidad no la hallarás en el prójimo sino dentro
de ti.
Y lo que más me sorprende de ti es tu bondad y cultura.
Una de cal y otra de arena.
Y no quiero ser pesimista, pero la cultura y la bondad están por debajo de
la inteligencia, en el ranking de la felicidad.
Palabra de cabra. Amén
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