Betyli, el amor es una barca, ya lo dijo Mari Trini, el amor es una barca con dos remos en el mar, un remo lo llevan mis manos, el otro lo lleva el azar... Preciosa canción, te recomiendo oírla, bueno, te cuento, verás, yo creo que en tu caso el amor es una barca que sólo tiene un remo, el que tú llevas, de ahí que no hagas más que dar vueltas, y te cuento mi experiencia, es importante que haya dos remos, encontrar a alguien que coja el otro remo y reme en la misma dirección, al mismo ritmo, con la misma intensidad, porque de no ser así no se va derecho, se tuercen las cosas, o si las cosas llegan al extremo ambos dejan de remar y la barca se para.
Yo ahora voy en piragua, mucho más práctico, yo me lo guiso, yo me lo como, cualquier percance depende de uno solamente, lo difícil en ocasiones es mantener el equilibrio y no acabar en el agua, luego cuesta mucho vaciar la piragua y volverse a encaramar, lo sé por experiencia, de joven practiqué algo el piragüismo, lo que he practicado más y durante más tiempo es el amor y sus barcas con dos remos, desde luego que me quedo con las piraguas, sin dudarlo, prefiero vaciar el agua de la piragua y encaramarme de nuevo a la piragua haciendo equilibrios, aunque me cueste esfuerzo y habilidad pero todo depende de mí y en mí confío, al menos por ahora.
Aunque a veces el agua está muy fría.
el paseante
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