También te digo que respetaba tu decisión
como fruto de tu libre albedrío, en ocasiones nos ofuscamos, o no, según se
mire, el corazón tiene razones que la razón no entiende, y el corazón de cada
uno es de cada uno, sin dudarlo, no soy quién para juzgar a nadie, me limité a
dejar fluir mis pensamientos y sentimientos.
Como bien dices en ocasiones no le veo
sentido a la vida, y más que en ocasiones yo diría que ése es un sentimiento ya
permanente, la vida tiene sentido desde la ignorancia, cuando eres consciente es
difícil verle el sentido salvo que te engañes, es mi opinión.
Todo lo que te dije ayer era también, todo
hay que decirlo, fruto de la rabia y la impotencia de no haberte podido hacer
entrar en razón, como si fuera fruto de la impotencia, de un deseo incumplido,
no sé si me entiendes, es difícil de explicar.
En todo caso creo que vale la pena vivir,
al menos por ahora, para ser más conscientes y disfrutar o mejor dicho volver a
disfrutar de todo lo que vale la pena, recapitular, hacer balance, ser más
sabios, todo eso llega, si es que llega, con la edad, es su beneficio, céntrate
en eso, yo es lo que procuro hacer, y además céntrate en los afectos sólidos, la
familia, algún que otro amigo, tus mascotas, ésas seguro que no te defraudan
nunca, yo pienso que me necesitan tanto, son realmente las únicas que me
necesitan absolutamente, indubitadamente, pero luego está el tema de que en
ocasiones eres más necesario para los demás de lo que piensas, existes de una
manera inconsciente pero si te paras a pensarlo hay toda una red en torno
tuyo.
Y no te desesperes tanto, siempre te
repito la misma frase de Memorias de África que dice la protagonista cuando todo
le va mal, es algo así: cuando todo me va mal y sé que no puede ir peor contengo
la respiración un momento y aguanto y entonces sé que puedo resistir cualquier
cosa.
Resistir cualquier cosa, piénsalo, de eso
se trata, ése es precisamente el juego de la vida.
Pues practícalo, yo lo hago y
funciona.
Un beso
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