Impresiona, es muy expresivo el cuadro, al parecer es un ritual de la religión judía, la escena es muy realista, muy cercana, transmite emoción en la fe, recogimiento, unión con Dios, profunda espiritualidad, cultivada espiritualidad hasta llegar a la vejez en la que las creencias se refuerzan preparándonos para nuestra aventura en el más allá, en lo desconocido que pretendemos de alguna manera a través precisamente de esas creencias conocer.
Cuando vi el cuadro me emocionó pero hice una interpretación equivocada, pensé que el anciano iba a morir esa noche y a eso se refería el título, pero como digo se refiere a un ritual de la religión judía que se llama precisamente así, La última noche de Hanuka.
En cualquier caso es un cuadro que te llega al corazón, con el que de alguna manera te identificas porque te toca en la fibra más sensible del alma, la del sentimiento de que algo nos espera más allá de la muerte, y la del sentimiento de que debemos preparar el espíritu para morir, dejar este mundo que conocemos en pos de algo que desconocemos, sea cuales sean nuestras creencias.
el paseante
No hay comentarios:
Publicar un comentario