Blog dedicado a reflejar mi trayectoria vital y mis reflexiones.
viernes, 19 de abril de 2013
Crítica teatral. El pimiento Verdi. Albert Boadella. Teatros del Canal (estreno 18-abril-2013).
Voy escribiendo esta crítica de teatro improvisada en el metro de vuelta a casa. Boadella, ¡cuánto tiempo ha pasado!, tal vez éste sea un montaje fallido, no sé cómo denominar lo que acabo de ver, una obra de teatro no creo que sea, un espectáculo, dejémoslo ahí, un espectáculo cómico, ligero, como una opereta, en ciertos momentos hilarante, en otros sublime, en otros soez, en otros aburrido, sin unidad, propósito, sentido, y lo peor, sobran los 30 minutos finales. Boadella no sabe cómo terminar la obra, empieza a hacer intentos de terminarla 30 minutos antes del final, de un final que llega por puro aburrimiento, una pena.
No sabe terminarla seguramente porque no ha sabido concebirla de una manera completa, darle un sentido, una unidad, un fin, una conclusión, se pierde en la astracanada desvirtuando en ese alargado final que nunca llega la música de los dos grandes, Verdi y Wagner.
Es lo que tiene creerse un genio, se pierde capacidad de autocrítica y en ocasiones uno se estrella.
La primera hora del espectáculo está muy bien, uno se ríe con esa sucesión de lugares comunes, chistes fáciles y astracanadas, y al menos se oye música, ópera, canto, como queramos llamar a lo que suena, que suena bastante bien, una lástima que todo eso se pierda y quede desvirtuado en los 30 fatídicos minutos finales.
Los actores-cantantes-músicos están magníficos aunque en los 30 minutos negros resulta patético verlos evolucionar en una serie de rebuscadas piruetas más propias de teatro de colegio.
el paseante
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Hola, Estuve anoche...y coincido con tu opinión. La mía, incluso puede ser peor...Creo que es un espectáculo bastante burdo, en conjunto, insuficiente y primario para los que conocemos algo de los dos genios, y aburrido y fallido para los que busquen un acercamiento a estas figuras... pues hay bromas y juegos , como la "opera" final, que algunas de las personas que me acompañaron no entendían bien de qué iba el rollo...En fin, una pena, desaprovechar a algunos de los buenos cantantes, con esas piezas interrumpidas, cambiadas de idioma, tema...con lo fácil que hubiera sido montar un espectáculo solo con esas voces, ese pianista, y ESA MUSICA:
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