domingo, 22 de diciembre de 2013

La esencia y la contingencia.



En general lo que nos gusta de otras personas en ocasiones es su esencia, lo que nos disgusta es su contingencia, la contingencia es la parte interesada, instintiva, mezquina, de las personas, su instinto de supervivencia, procreación, defensa de su espacio, todo lo que implica lucha y el quítate tú para ponerme yo, el egoísmo en definitiva.
La esencia es el amor incondicional, algo que tenemos por estar hechos a semejanza de Dios, entre ambas dimensiones nos movemos.
el paseante

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Qué linda tu reflexión. Quiero agregarle lo siguiente: sólo personas especiales, muy inteligentes, que te aman y tienen el don de ver las esencias, cuando uno/a actúa según su contingencia, recuerdan tu esencia, y te dejan entrar y salir de donde te metiste gracias a la contingencia, acompañándote sin abandonarte, porque saben que ella pasa, o te previenen haciéndote ver tu esencia.
Los/las que sólo ven lo contingente quizás se pierdan bellas personas, a las que con amor o amistad podrían haber cambiado. Le esencia siempre está, porque estamos hechos a imagen y semejanza de Dios.

Y viceversa, las personas que no saben de su esencia, vivirán permanentemente según la contingencia, sin nadie que las oriente, las ame, las acompañe.
BC

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No había visto este correo cuando te contesté aquel en el que analizabas la esencia y la contingencia. De más está decir que yo te quiero por tu esencia, y que he dejado pasar la contingencia siempre. Creo que un buen ejemplo es haberte buscado hasta bajo tierra, cuando tenía miles de voces que me decían "déjalo ya, no quiere saber nada de tí". Yo siempre supe cómo eres, y sabía, en consecuencia, que tu esencia afloraría en cualquier momento, recomponiendo la amistad. Con el reencuentro vinieron las confesiones, y cuando me dijiste que pensabas que yo era mala suerte, que cuando había estado en tu piso te había puesto muy nervioso, al punto que salías muy desquiciado a trabajar, y que respiraste profundo cuando me regresé, reflexioné sobre muchos aspectos de nuestra amistad. Medité y concluí que si tú podías expresarte libremente conmigo, eso era más bueno de lo que en definitiva expresaras, y se alegró mi corazón.
BC

 

1 comentario:

  1. Me encantan todas sus reflexiones... Desde Perú, mis saludos y felicitaciones.

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