83 – Redecora tu
vida.
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Comisario, no le parece que ya va siendo hora de
cambiar un poquito la decoración del apartamento.
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A qué se refiere Bruttini?
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Pues a que todo es muy anticuado, estos muebles
ya nadie los tiene, son tristes, oscuros, parecen sacados de un contenedor, y
los electrodomésticos son de la época de mi abuela, también está el tema de los
cuadros…
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Qué pasa con los cuadros?
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Verá Comisario, hay demasiados, desde el suelo
hasta el techo, eso es agobiante, y tantas plantas, esto parece la selva.
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Me gustan las plantas.
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Y luego está el tema de todo este desorden,
papeles, libros, facturas, cartas, hojas garabateadas, zapatos, jerseys, todo
anda por cualquier rincón.
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Pero a mí me gusta ese desorden, yo sé dónde
encontrar cada cosa.
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Y la cocina, Comisario, esa cocina…
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Qué le pasa a la cocina?
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Que es un puro desorden y necesita una buena
limpieza a fondo, hace cuánto tiempo que no viene a limpiar la asistenta?
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Ahora limpio yo.
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Así está todo Comisario, así está todo, lleno de
polvo, las camisas sin planchar, en lugar de planchar una camisa he observado
que prefiere comprarse una nueva.
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Exagera Bruttini.
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Exagero? Ha abierto la nevera últimamente?
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Qué le pasa a la nevera?
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Comisario, me permite una pregunta?
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Adelante.
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Pero usted qué come exactamente?, en el tiempo
que llevo viviendo aquí no he logrado averiguarlo, usted de qué se alimenta?,
de esas cuatro cosas caducadas y resecas que tiene en la nevera?, no le parece
que va a acabar enfermando?
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Qué exagerado es usted!
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No exagero Comisario, en absoluto, es más, yo
diría que me paso de prudente, cualquiera en mi lugar no habría aguantado vivir
en estas condiciones, mire ese baño, ha visto usted el baño?
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También el baño, qué le pasa al baño?
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Comisario usted tiene la manía de bañarse en
lugar de ducharse…
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Sí, y eso es malo?
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Malo no es, lo que es malo es no limpiar nunca
la bañera, esa raya negra que tiene ya no se quita ni con lejía.
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Lejía? No habrá usado lejía en esta casa?
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Pues sí, cómo pretende que desinfecte todo?
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No use lejía, piense en el gatito, puede
envenenarse.
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Déjeme a mí Comisario y verá como nadie se
envenena, tan sólo los gérmenes y las bacterias, ya lo verá.
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Bueno, pero úsela con precaución.
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Déjeme a mí y usted tranqui, relájese un poquito
y verá que pronto esto empieza a parecerse a una casa como Dios manda, en mi
casa con mi mujer y mis hijos era yo el que limpiaba, recuerda cómo estaba mi
casa el día que le invitamos a comer?
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Impoluta.
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Pues así va a estar en poco tiempo este
apartamento. Otra cosita: me permite tirar todo lo que no valga?
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No, eso sí que no, tiene que preguntarme antes,
yo no tiro nunca nada.
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Ya, ya lo he visto, los armarios están llenos de
ropa vieja que no usa, guarda cosas hasta de cuando era niño, juguetes, una
bici con ruedines, la cantimplora de las excursiones, la palita con la que
jugaba en la playa…
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Bueno, son recuerdos de toda una vida.
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Comisario no sea tan sentimental, mire al
futuro, está parado en el pasado y eso no puede ser, de la nostalgia no se
vive.
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Yo sí.
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Así le va si me permite decirlo, cada día más
depresivo, aburrido, amargado.
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Bruttini no se pase…
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Pero si es así, si todo el mundo lo dice de
usted.
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Todo el mundo?
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Sí, todo el mundo, además se ha convertido en un
carca.
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En un carca?
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Pues sí, cómo se le ocurre tener un retrato de
Franco en el comedor?
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Cree que eso da una buena imagen a cualquier
visita que venga?, estamos en el año 2015, Franco lleva muerto mil años, por
favor espabile.
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Bruttini mientras viva aquí tiene que respetar
mis costumbres y mi forma de vida.
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Vale, pero me autoriza a hacer unos cuantos
pequeños cambios?
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Bueno, pero bajo mi supervisión, no lo olvide.
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Mañana empiezo.
(continuará)
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