Felicidades Bruttini (Un asesino en las calles 64).

64 – Felicidades Bruttini

-          Bruttini, felicidades, soy el Comisario Carballo.

-          Muchas gracias por acordarse Comisario, qué tal está?

-          Muy bien estoy en Barcelona en misión especial por lo del referéndum.

-          Y qué tal? No me había comentado nada, me hubiera gustado acompañarle.

-          Es que surgió todo de improviso, pero vamos, muy bien, está todo muy tranquilo, esta gente es muy civilizada, no hay altercados ni revueltas ni vandalismo, un ejemplo.

-          Ya, pero no se le olvide Comisario que ese referéndum es ilegal.

-          Si estuviera aquí conmigo viendo lo que yo estoy viendo tal vez pensara que el referéndum es ilegal pero que no es ilegítimo, mire Bruttini, esta gente necesita la independencia, la vive como un sentimiento propio, creen en Cataluña como nación.

-          Comisario le recuerdo que usted forma parte de las fuerzas de seguridad del Estado.

-          Ya lo sé, pero Bruttini aquí se respira una ilusión, una energía, que se contagia, le diría que casi me siento catalán.

-          Comisario tenga cuidado con lo que dice y no se meta en líos, usted ya no tiene edad para revoluciones, vuélvase a casa en cuanto tenga ocasión y no se ponga en evidencia con sus superiores, el altruismo tiene las alas muy cortas, acuérdese de nuestra experiencia siempre.

-          Ya Bruttini, lo sé, lo sé, le haré caso, pero no se imagina el ambiente que se respira aquí. Bueno, y usted qué tal?, cómo va a pasar su cumpleaños?, lo va a celebrar?

-          Esta tarde haremos una fiesta en el Divas Club con mis compañeras y los clientes más fieles, si quiere venir está invitado.

-          No podré Bruttini, no volveré hasta mañana a Madrid.

-          Comisario, tengo que contarle una cosa.

-          Dígame.

-          Pero prométame que no se va a enfadar.

-          Se lo prometo.

-          Pero me lo promete de verdad?

-          Se lo prometo de verdad.

-          Comisario, me he enamorado.

-          De quién…?

-          Pues de una mujer.

-          La conozco?

-          No Comisario, es una señora muy atractiva que vino a ver la actuación de anoche en el Divas Club, como broche final de la actuación me senté en sus rodillas y la besé.

-          La besó?

-          Sí la besé y me enamoré.

-          Se enamoró?

-          Sí.

-          Está seguro?

-          Totalmente seguro Comisario.

-          Y por qué dice que me iba a enfadar?

-          Porque yo creo que usted está enamorado de mí Comisario.

(continuará)