Me salieron muy buenas las torrijas, utilicé un pan especial que compré en Eroski, lo podéis ver en la foto, tiene la apariencia de un pan de molde pero con rebanadas más gruesas y una consistencia mayor, se empapa muy bien y no se deshace al mojarlas.
Por lo demás podéis ver en la foto los ingredientes, leche mezclada con azúcar y canela, revolver bien hasta que los ingredientes se mezclen por completo, huevos batidos con azúcar y canela, lo mismo, batir hasta que estén bien mezclados con el azúcar.
Aceite virgen extra, al ser un dulce la torrija de origen andaluz y, por tanto, de origen árabe, el elegir un buen aceite es fundamental teniendo en cuenta además que el mejor aceite de oliva del mundo es el español y en concreto el de la provincia de Jaén, en esta ocasión elegí un aceite con muy buena relación calidad-precio, aceite virgen extra marca Carrefour, tiene un sabor intenso y afrutado y un color verde intenso con una transparencia muy luminosa, es uno de mis favoritos por su sabor, está a la altura de los aceites más exclusivos.
Remojar las rebanadas de pan en la mezcla de leche, azúcar y canela, dar dos vueltas por la mezcla para que empapen bien, luego pasar rápidamente por la mezcla de huevo, azúcar y canela y echar a la sartén que deberá tener ya el aceite muy caliente, que eche humo pero sin que llegue a quemarse.
Vuelta y vuelta, que queden tostadas sin quemarse, rápidamente se sacan a una fuente donde deben quedar bien extendidas.
Cuando todas las torrijas hayan pasado por la sartén hacemos el almíbar, para ello en un cazo echamos bastante azúcar y algo de agua, lo ponemos a hervir, vamos removiendo y cuando el almíbar comienza a oscurecer lo retiramos y lo echamos por encima de las torrijas en la fuente en la que las hemos colocado bien extendidas para que todas absorban bien el almíbar y queden más jugosas. Procurar que el almíbar quede algo tostado pero no mucho, si lo tostamos demasiado quedaría demasiado pegajoso, se trata de que quede líquido.
Meter la fuente en el frigorífico una vez que se hayan enfriado las torrijas, cubrir con un papel de aluminio a fin de que no absorban los olores de la nevera.
Y ya tenéis hechas un exquisitas torrijas con la receta de el paseante, que las disfrutéis y que os gusten mucho.
Felices torrijas,
el paseante
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