lunes, 29 de septiembre de 2014

Rememorar.




Caser, yo estoy en un periodo aún más reflexivo, estoy como de balance de vida, y sintiendo en diferido aquellas sensaciones que he vivido, es como vivir en el pasado, subo mi pensamiento a mis recuerdos y allí se deleita, disfruta, ahora rememoro más bien los momentos dichosos, de felicidad, de vivir intensamente, gozosamente, tal vez no habiendo sido entonces totalmente consciente de esos momentos únicos que no volverán, pero siéndolo ahora.

Rememoro sentimientos, emociones, pensamientos de aquellos momentos de mi vida, y me digo a mí mismo que he vivido indudablemente y que disfruté de la vida, de ese proceso que es la vida, que te enriquece, te hace crecer, te va haciendo más sabio, estoy, en balance, satisfecho de mi vida en general y me considero en gran medida un privilegiado, aún con mis errores, carencias, frustraciones, hay también junto a todo eso muchos aciertos, capacidades, realizaciones, hay mucha luz, mucha ilusión, y sobre todo hay mucho cariño, mucho amor, mucha comprensión y solidaridad, tanto por mi parte como por parte de los demás en ocasiones.

Vale la pena vivir?, me pregunto, y me contesto que sí, indudablemente sí, comprendo la tristeza que supone dejar este mundo cuando se ha tenido una vida como la mía en la que la luz vence a la tiniebla y hace resplandecer la belleza de la vida, del mundo, la naturaleza, los seres vivos, las personas..., los colores, la luz, las formas, los sonidos, la armonía en definitiva de esta obra única e inigualable de Dios.

bss,

jr

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