jueves, 26 de diciembre de 2013

La lectura del fin de semana. Vida de Jesús. Ernest Renan. 1860.



Otro libro imprescindible, de esos que a veces salen en las colecciones "libros básicos de la cultura universal". Y, además, se lee muy a gusto.

Sobre Ernest Renan http://es.wikipedia.org/wiki/Ernest_Renan

Este librito (trescientas páginas) aparece hacia 1860 y produce un gran sobresalto mundial. Por primera vez se aúnan rigor y rupturismo en la obra de este académico que narra, en un estilo más de ensayista y hasta de viajero, lo que otros habían expresado con pedantería académica o devoción erudita.

La visión de Jesucristo de Renán está muy cerca de la habitual hoy, desvinculándole del mundo de lo sobrenatural y haciéndolo, por tanto, más universal, pero es el primer libro que conmueve al mundo con una idea racional acerca del mensaje del cristianismo. En suma: es el nacimiento del cristianismo laico.

los primeros cristianos son visionarios que se agitan en un círculo de ideas que calificaríamos de delirantes, pero al mismo tiempo son los héroes de la guerra social que ha desembocado en la emancipación de la conciencia y en el establecimiento de una religión de la que acabará, tarde o temprano, por salir el culto puro anunciado por el fundador

Se le acusó de presentar a Jesucristo como un anarquista, inevitable con párrafos como éste (recordemos que estamos en 1860):

las tentativas socialistas de nuestra época seguirán siendo infecundas hasta que tomen como regla el verdadero espíritu de Jesús, es decir, el idealismo absoluto, el principio de que para poseer la tierra hay que renunciar a ella

Por supuesto, Renan es completamente racional y desdeña todo asunto sobrenatural, tales como milagros y ultratumbas. La idea de Renan acerca de la "religión pura" fundada por Jesús con tan trascendentales consecuencias es una moral universal, una idea cultural, y en su lúcido análisis, por cierto, no olvida que buena parte de sus doctrinas tienen orígenes anteriores (sabiduría rabínica e incluso budismo e hinduísmo a través de las filosofías helenísticas):

Poco original en sí misma si con esto se quiere dar a entender que se la podría recomponer enteramente con las máximas más antiguas, la moral evangélica permanece como la más alta creación que haya salido de la conciencia humana... 
gracias a Él una idea absolutamente nueva , la idea de un culto basado en la pureza del corazón y en la fraternidad humana entraba en el mundo...
Los rabinos Jesús de Sirach e Hillel pronunciaron aforismos casi tan sublimes como los de Jesús de Nazareth. Hillel, sin embargo, nunca podrá pasar como el fundador del cristianismo. En moral, como en arte, hablar no es nada, hacer lo es todo. La idea oculta bajo un cuadro de Rafael es bien poca cosa, es tan sólo el cuadro lo que cuenta. Del mismo modo, en moral la verdad carece de todo valor si no tiene lugar en forma de sentimiento, y sólo alcanza su premio cuando se realiza en el mundo en forma de hecho. Algunos hombres de mediocre moralidad han escrito máximas muy notables. En otro terreno, algunos hombres muy virtuosos no han hecho nada para continuar en el mundo la tradición de la virtud. La palma pertenece a quien ha sido poderoso en palabras y en obras, al que ha conocido el bien y lo ha hecho triunfar al precio de su sangre. Jesús no tiene igual en este doble aspecto; su gloria permanece entera y siempre será renovada


Cabe preguntarse si Renan y otros hombres de su tiempo se plantearon que llegara a surgir un cristianismo racional y ateo como el que postulaban. Por lo menos, escribió este libro...
 
Fuente: ¡¡Ábrete libro!! - Foro sobre libros y autores - www.abretelibro.com
 

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