jueves, 11 de julio de 2013

Concha García Campoy en el recuerdo.



Tengo que decir algo, no puedo dejar de hacerlo, como espectador y por el cariño que la tenía cuando en mis veranos ibicencos me encontraba con ella, siempre tan sonriente, tan agradable, con ese saber estar y esa profesionalidad que se desbordaba siempre hacia los demás acogiéndolos, comprendiéndolos, ayudándolos, esa impresión me daba siempre Concha García Campoy, tanto en la pantalla, en la radio, en la letra impresa de la prensa, como al natural sentada en alguna terracita de la Rambla de Vara de Rey de su Ibiza querida, su tierra, su pequeña patria, o en alguna tertulia, o en algún restaurante de buen comer y mejor charlar con sus entrañables amigos de la isla.

Nunca me atreví a hablar contigo Concha, te miraba y me sonreías, notabas el aprecio que te tenía, uno nota esas afinidades, admiré siempre tu mesura, tu buen gusto, tus exquisitas maneras y tu forma tan delicada de decir la verdad y de encarar los problemas de frente, igual que hiciste con tu enfermedad, valientemente.

Me resulta chocante que alguien tan sano como tú pudiera estar enfermo, alguien tan sano en todos los sentidos y tan feliz en esa tu isla con la cual compartías ese espíritu tolerante, abierto, cosmopolita, integrador.

Hoy por primera vez me atrevo a hablarte, era tanta mi admiración por ti que me quedaba bloqueado cuando te veía y tú me mandabas tu preciosa sonrisa de gran dama del periodismo y de la vida.

A Ibiza le faltará ya siempre algo sin ti, tu presencia insustituible, aunque guardaremos siempre tu recuerdo y tu ejemplo.

Te envío hoy mi última mirada en el recuerdo.

josé ramón

Me voy de vacaciones!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

El paseante en la playa de Es Cavallet en Ibiza (foto de archivo).


Me voy de vacaciones!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Me voy de vacaciones ligero de equipaje!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Ligero de equipaje, casi desnudo, como los hijos de la mar...

Como dijo el poeta...

Un beso para todos!!!!!!!!!!!!!!

Aprovechad para sumergiros en las refrescantes aguas del blog.

Nos vemos en agosto queridos seguidores.

el paseante

martes, 9 de julio de 2013

Sin título.

Sin título. Mi sobrina Constanza. Témpera sobre papel. 2013.

El cuadro de la semana. Muchacha de azul leyendo una carta. Johannes Vermeer. 1663-1664.



Cuando habla de la habitación, no quiere olvidar las ventanas que a veces se encuentran en ella. La habitación no es necesariamente una imagen de la conciencia hermética; él sabe que cuando un hombre o una mujer están de pie o sentados en una habitación, allí hay algo más que el silencio del pensamiento: el silencio de un cuerpo que lucha por transformar sus pensamientos en palabras. No intenta sugerir que todo lo que ocurre entre las cuatro paredes de la conciencia es sufrimiento, como se desprende de sus alusiones previas a Hölderlin y a Emily Dickinson. Piensa, por ejemplo, en las mujeres de Vermeer, solas en sus habitaciones, con la luz brillante del mundo real entrando a raudales por una ventana abierta o cerrada, y la absoluta inmovilidad de aquellas soledades, una evocación casi desgarradora de la vida cotidiana y de sus inconstancias domésticas. Piensa sobre todo en una pintura que vio en el Rijksmuseum de Amsterdam, Mujer en azul, y cuya contemplación lo dejó absorto. Tal como escribió un crítico: " La carta, el mapa, el embarazo de la mujer, la silla vacía, la caja abierta, y la ventana invisible son todos recordatorios o emblemas naturales de la ausencia, de lo invisible, de otros espíritus, otros anhelos, tiempos y lugares, del pasado y del futuro, del nacimiento y tal vez de la muerte; en resumen, de un mundo que se extiende más allá del marco del cuadro, y de horizontes más grandes y más amplios que abarcan la escena que aparece ante nuestros ojos e interfieren en ella. Y sin embargo Vermeer insiste en la plenitud y la independencia del momento presente, con tal convicción que su capacidad para orientar y contener cobra un valor metafísico".

Pero más que  los objetos mencionados en esta lista, es la cualidad de la luz que penetra por la ventana invisible, a la izquierda del espectador, la que con tanto ímpetu lo induce a concentrar su atención en el exterior, en el mundo que está más allá del cuadro. A. mira con fijeza el rostro de la mujer, y a medida que pasa el tiempo, casi le parece escuchar su voz leyendo la carta que tiene en la mano. Ella, tan preñada, tan tranquila en la inmanencia de su maternidad, lee la carta que sacó de la caja sin duda por centésima vez; y allí, colgando en la pared a su derecha, un mapa del mundo, el símbolo de todo lo que existe fuera de aquella habitación: aquella luz, una luz tan pálida que raya en el blanco, bañando con delicadeza su cara y brillando sobre su blusa azul, el vientre henchido de vida y el azul bañado en luminosidad. Para seguir con lo mismo: Mujer sirviendo leche. Mujer con balanza. El collar de perlas. Mujer joven ante la ventana con un jarro. Niña leyendo una carta ante la ventana abierta.

"La plenitud e independencia del momento presente".

(Fragmento de la novela La invención de la soledad de Paul Auster)

La fuerza superior que crea a través de mí.



Bueno, me alegra mucho que te gustaran las dos frases sobre el alma.

Son parte de Historia de mi alma, otra entrada de esta semana.

Cuando las resalté como frases de la semana pensé en ti, en que te iban a gustar especialmente, tienen tu toque espiritual, místico, elevado, ese toque que tú me has inspirado y que has potenciado en mí pero que yo llevaba ya conmigo desde siempre y que había perdido.

Esa senda a la que tú me hiciste volver a raíz de nuestro encuentro.

Eres mi maestra espiritual y me gusta que valores lo que escribo de manera especial, porque tú me entiendes mejor aún de lo que yo me entiendo, vas más allá de mi comprensión, eres como un espejo que me devuelve lo que hago con una dimensión mayor de la que yo era consciente, como si al conectarme con el alma universal y crear algo fuera sólo un instrumento y no fuera plenamente consciente, creo que una creación, sea del tipo que sea siempre se completa por los demás, se acrecienta, perfecciona, se hace más grande al pasar por otros espíritus y abre en ellos nuevos caminos.

Me parecía que convenía destacar esas dos frases de entre todas las de Historia de mi alma, cuando las releí me quedé impactado, me parecía que no las había escrito yo, ni las recordaba ya, debí estar tan conectado cuando las escribí que no era apenas consciente, creo que se escribieron a través de mí.

No sé si me entiendes lo que digo, siempre que escribiendo, pintando, me conecto, sé que algo que está fuera de mi consideración va a ser el resultado, no puedo modificarlo porque no me siento capaz de corregir a esa fuerza que crea a través de mí, esa fuerza superior.

Un beso,

jr

lunes, 8 de julio de 2013

La Administración Pública y yo (2).




Bueno, continúo, ingresé en la Comunidad de Madrid en diciembre de 1986, sólo estuve un año en el Estado, al aprobar la oposición de la Comunidad de Madrid me tuve que incorporar a esa Administración, me fui con pena y alegría a la vez, pena porque estaba muy contento en mi trabajo y alegría porque subía de estatus e iba a ganar más dinero, pero creo que el miedo al cambio hizo que sintiera más pena que alegría, me había apegado al anterior trabajo.
La Comunidad de Madrid por aquel entonces era poco más que una Diputación Provincial, tenía pretensiones de Comunidad Autónoma pero todo se quedaba en eso, en pretensiones, nada que ver con la Administración del Estado,  esa impresión me dio.
A partir del año 95 la Comunidad de Madrid dio un vuelco total, se modernizó, asumió su techo competencial máximo, se convirtió en un pequeño miniestado, gestionaba la sanidad, los servicios sociales, la educación, la administración de justicia, acometió el desarrollo y mejora de las infraestructuras, con este estado de cosas se hacía necesario contar con unos servicios públicos de calidad y competitivos, se creó la Dirección General de Calidad de los Servicios en la cual trabajé durante 10 años desarrollando proyectos de mejora en los que participaban unidades de todas las áreas de actividad, en esos 10 años me relacioné con profesores, maestros, médicos, enfermeras, personal de servicios sociales, personal de atención al ciudadano, con otras Administraciones, participé junto a ellos en los proyectos de mejora que ponían en marcha, les di clases sobre mejora de la calidad, hice equipo con ellos, y de ellos aprendí lo que es realmente la Administración, los servicios esenciales que presta a la sociedad, y lo que es el componente vocacional del servicio público, quedé impresionado de la labor que contra viento y marea realizaban día a día mis compañeros, me sentí emocionado y orgulloso de ser empleado público. Había descubierto lo que de verdad es ser funcionario, lejos del tópico.
No obstante a los 10 años decidí marcharme, dejé de ser Jefe de Área de Calidad de los Servicios, aquel puesto me había fagocitado, era como esos actores antiguos que recitaban el Tenorio y ya no sabían quién eran, me marché con pena pero había cubierto una etapa, había puesto en marcha proyectos desde cero, había sentido la ilusión de montar algo desde la nada y de obtener unos resultados que quedaban ahí como semilla de futuro y, sobre todo, de haber obtenido esos resultados fruto de la cooperación y del enriquecimiento mutuo.
Recuerdo el día que me despedí de mi pequeño despacho en el edificio de Gran Vía 18, me asomé a la ventana, miré el tráfico de la Gran Vía, miré enfrente y ví la fachada neoclásica del Casino Militar, me sentí triste, pensaba que nunca volvería a tener un trabajo tan bonito y satisfactorio como aquél…
(continuará)
El paseante

La película de la semana. Una noche en la ópera. Sam Wood. 1935.



Una noche en la ópera.
 
Es otra de la viejas películas que tengo en la casa del pueblo, aprovecho para verlas las tardes de los sábados, tiene algo de ritual el ver estas antiguas películas en el viejo video en la buhardilla mientras fuera cae la tarde y se van primero encendiendo vivamente y luego apagando lentamente los colores del paisaje, como si se tratara de un cuadro animado.
Esta película me la encontré junto con otras en un contenedor de basura, soy un poco trapero, tal vez tengo algo del famoso síndrome de Diógenes, el tiempo lo dirá, en este caso había tiradas en el contenedor una buena colección de películas clásicas, pasé, miré, me llamaron, a mí las cosas me llaman, me saludan, me hablan, las cosas para mí tienen vida, tienen ánima, son animadas, nunca mejor dicho, y no inertes como cree casi todo el mundo.
Volviendo a la película, disparatada película, con un humor que hace pensar, que refresca la mente en estos tiempos que corren tan duros, verla me hizo recordar mi niñez, cuando la vi por primera vez en algún Especial Vacaciones de la Televisión, y también recordé mi juventud, cuando la volví a ver en mi añorado Cinestudio Griffith de la orilla del río Manzanares, ese lugar tan evocador y romántico para encerrarse a ver buen cine y vivir con la imaginación todas esas aventuras de las películas.
El Cinestudio Griffith y sus ciclos, sus maratonianas sesiones, su olor a gato, y sus butacas desvencijadas en las que uno no sabía cómo colocarse después de tantas horas de cine, de frío y de calor, y de humo porque hasta se podía fumar en aquella vieja sala de cine de barrio.
Y Groucho en la pantalla, ayer como hoy, Groucho inmortal, eterno, Groucho provocando, sacando a la luz todo el poder de la verdad, de la verdad cruda del disparate absurdo de la sociedad, las conveniencias, y las falsas apariencias.
La película es una comedia musical, tierna y romántica, humorística, incluye la famosa escena del camarote y la también famosa del contrato, la parte contratante de la primera parte y todo eso…, hilarante, también hay canciones muy románticas y hasta escenas de ópera, y una millonaria objeto de las bromas absurdas de Groucho.
Por cierto, alguien sabe si el mudo de los hermanos Marx era realmente mudo, lo que sí era es divertidísimo, da un contrapunto de payaso disparatado que es como la otra cara de la película, como un paréntesis dentro de la película, y qué decir de Chico y sus reflexiones tan obvias y tan por eso mismo inconvenientes y transgresoras.
Los hermanos Marx ponen patas arriba todo en esta divertida película que gana con el paso del tiempo por tratarse de un ejemplo de cine atemporal que habla directamente al alma de cualquiera, y en concreto al niño que todos llevamos dentro.
El paseante

Las frases de la semana (nº 4). Mi alma.



Escribe mi alma la historia de mí día tras día pacientemente, y la novela de mi vida va quedando escrita en el aire como el canto de un ave, el aroma de una flor, el susurro del viento, el rayo de luz.

Extiendo mi alma bajo los pies del mundo para que cualquier peregrino pueda pisarla y sentir su mullido tacto de seda.

(Historia de mi alma por José Ramón Carballo)


domingo, 7 de julio de 2013

Historia de mi alma por José Ramón Carballo.




Historia de mi alma.

-          La historia de mi alma se basa en suposiciones, en realidad no sé nada de ella a ciencia cierta.
-          Mi alma me contiene, me envuelve, abraza, acaricia, susurra, mi alma es amor.
-          Mi alma existe y existirá desde siempre, es eterna, su historia es la historia de la eternidad, la eterna permanencia.
-          Cuando mi cuerpo vino al mundo mi alma se encarnó transitoriamente en él.
-          Mi alma es la que sonríe mientras yo lloro. La que llora mientras yo sonrío. Mi alma busca el equilibrio de lo permanente porque es eterna.
-          Voy descubriendo mi alma a medida que descubro la vida, la vida me va mostrando mi alma, el día que ese conocimiento sea total moriré.
-          Mi alma es idéntica a la de cualquiera, pero los demás aún no lo saben, eso creo, sólo lo sé yo desde hace poco tiempo.
-          Mi alma es idéntica a la de los demás porque forma parte del gran alma universal que es eterna.
-          Mi alma es el cosmos de mi vida.
-          El alma es el cosmos de la vida.
-          El alma contiene en sí la dicha de la perfección absoluta.
-          Desconozco la razón por la que mi alma vino al mundo encarnada en mí.
-          Desconozco la razón por la que mi cuerpo encarnó mi alma.
-          El alma no admite razones, es la razón máxima, la culminación máxima de la razón, la idea perfecta y razón de todo.
-          Sin alma no se puede vivir, resulta curioso, sin alma sólo se puede subsistir.
-          Escribe mi alma la historia de mí día tras día pacientemente, y la novela de mi vida va quedando escrita en el aire como el canto de un ave, el aroma de una flor, el susurro del viento, el rayo de luz.
-          Me despierto a mi alma cada mañana como quién se asoma a un acantilado del que nunca logra ver el final, la última sima de la profundidad.
-          Háblame, mi alma te escucha siempre aunque yo no lo haga, mi alma entiende un leguaje que no necesita de las palabras.
-          Extiendo mi alma bajo los pies del mundo para que cualquier peregrino pueda pisarla y sentir su mullido tacto de seda.
-          Espero quieto en mi alma un instante de dicha supremo en el cual sea consciente al fin de mí.
-          Mi alma es el beso con el que yo beso el mundo.

El paseante

Decíamos ayer. Mayo 2012 (4). Mi cuerpo en primavera y otras historias.

viernes, 18 de mayo de 2012


340 visitas en un solo día!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

 
Nuevo record del blog, en el día de ayer, 17 de mayo de 2012, el blog ha batido un nuevo record:
340 visitas al blog en un solo día!!!!!!!!!!!!
Qué pasada!!!!!!!!!!!!!!
El blog de el paseante batiendo records.
Muchas gracias,

el paseante

La lectura del fin de semana. La forja de un rebelde. Arturo Barea. 1951.

Josep Renau. Cartel de la Guerra Civil.

 La guerra civil española en una novela, en una trilogía, pero no solamente la guerra civil en sí misma, sino además sus antecedentes, es decir, su porqué, en la primera parte La forja, se narran las miserias de la niñez y adolescencia del protagonista en Madrid, en la segunda parte La ruta, la guerra de Marruecos, en la tercera La llama, se narra la guerra civil, todo ello narrado en primera persona y basado en las experiencias del escritor, las tres novelas son eminentemente autobiográficas, basadas en las experiencias vividas por Arturo Barea.

Y se nota que ha vivido lo que cuenta, y se nota su pasión en lo que escribe, sus ilusiones, sus decepciones, su lucha, su esfuerzo, su fracaso, todo lo suyo y lo de muchos otros en esa época fundamental en la historia reciente de España.
El trasunto que subyace detrás de toda la trama, como leitmotiv ininterrumpido no es otro sino la lucha de clases, es una visión de izquierdas de todo lo sucedido, desde la perspectiva de una conciencia social y de clase, de denuncia de las injusticias sociales, y de justificación de la llegada de la segunda República.
Todo queda meridianamente claro, sin olvidar que es la visión de un bando, no se pide objetividad, equilibrio, medida, la trilogía de Barea es una obra de arte apasionada, fruto de la febril y encendida creatividad de su creador, su obra, podríamos decir, es él mismo, no se pueden diferenciar, y por eso mismo su lectura resulta apasionante.
Yo no pude parar de leerla hasta el final, fue todo un descubrimiento para mí su lectura, absolutamente apasionante, emociona la prosa de Barea, hace en ocasiones llorar de la emoción, maneja el escritor la técnica narrativa de una manera apasionante que hace te enganches a la lectura como hacen siempre las grandes novelas.
Cuando termina la lectura de la obra te entristeces, da pena salir de ese universo lleno de pasión y de vida, lleno de ideas, de ilusiones, y de las decepciones y fracasos propios de la vida, de toda vida, de cualquier vida.
Barea te transporta como nadie a todos esos escenarios, a todos esos acontecimientos, a todos esos momentos claves y apasionantes de la historia reciente de España.
No se pide imparcialidad, ¿quién pide eso a una novela?
Se pide, simplemente, genialidad, y de eso hay de sobra en la trilogía de Barea, y se pide poder visualizar esos momentos, y vivirlos como si se estuviera allí, eso pide el lector, y Barea se lo da con la generosidad del artista realmente grande que nada espera a cambio sino dejar testimonio a través de su arte de su visión del mundo que le ha tocado vivir.
Gracias Arturo Barea por tu generosidad.

el paseante

jueves, 17 de mayo de 2012


Mi cuerpo en primavera (repetición).

Estoy buenísimo.
Tengo un subidón que te pasas...
No sé si será por la primavera pero noto como si no pisara la tierra, como si volara.
Energy, of course, energy, I love my energy, it's something delicious.
Do you agree with me or desagree?
Tell me, please.
What do you thing about this question?
Volviendo al tema, estoy buenísimo, ¿o no?
Estoy que me salgo, estoy como un queso, estoy como un tren.
Soy un sex symbol, un mito erótico, un referente sexual.
Seguro.
Voy derramando my sex appeal por donde paso.
Y es que en primavera todo se derrama.
Hasta el paseante.
Las neuronas se vuelven locas.
Las hormonas comienzan a hacer de las suyas.
Las neuronas son unas salidas.
Me abro a la primavera como las flores se abren.
Me abro al amor.
Estoy abierto al amor...
Mi corazón se abre a tu voz, primavera.

el paseante

María Antonieta desde el cielo. Mi querido niño... (repetición).

"El suave tacto de tu piel que iluminaba mi alma con la luz del amor..."
Mi querido niño, mi tierno infante, no veo el momento de volver a acariciar tus cabellos, de sentir el suave tacto de tu piel, el delicado roce de tus labios, y la dulzura de tu mirada sobre mí.
Quiero volver a oír la música de tu voz, susurrando en mis oídos palabras de amor, escuchar la ternura de tus amorosas palabras aleteando en el aire como mariposas de amor que acarician mi cuello con el suave roce de sus alas de seda, haciéndome estremecer de placer.
Estar ya siempre junto a ti, por toda la eternidad, amor, te quiero.
La Reine
Marie Antoniette

Soy un mito sexual (repetición).

A veces me pregunto si se me puede considerar ya un mito sexual.
Pienso que sí, indiscutiblemente, el blog me ha catapultado al estrellato de los grandes mitos sexuales de la historia, pertenezco a la leyenda, soy ya un personaje mítico también por lo que al sexo se refiere.
Antes se me podía considerar un mito sexual doméstico, en mi entorno inmediato, amistades, conquistas, compañeros/as de trabajo, conocidos/as, vecinos/as, etc...
Claro, era conocerme y caer en mis redes, los mitos sexuales somos como las arañas, tejemos nuestra red de encantos y las presas, las víctimas, las moscas, van cayendo.
Porque los/as admiradores/as van cayendo como moscas, nunca mejor dicho, en la red.
Pero, ¿y qué hace la araña con ellos cuando caen?
Pues se los come.
¿Y si caen muchos?
Se los va comiendo como puede.
Y si son muchísimos.
Pues abre un blog.
Es decir, el blog es mi tela de araña, se extiende por numerosos países y llega a muchas personas, lectores, seguidores, fans, y sigue creciendo, es una red internacional, y además tiene cabida suficiente para que vayan cayendo todos lo que así lo quieran.
Poco a poco algunos días, de una forma frenética otros días, de una forma apasionada otros días, de una forma reflexiva otros días...
Pero día a día van cayendo sin parar.
Y ahí van quedando enganchados del mito.
Del mito sexual.
Esperando ser fecundados, polinizados, penetrados...
Por el aguijón de la inteligencia, por el veneno del amor, por el opio del sentimiento, por el placer de la emoción.
El blog es la sala de espera de un mito, de un mito sexual, el paseante.
De un mito sexual que va creando nuevos adictos día a día.

Besos apasionados,

el paseante mítico

Entrada nº 886.



Menudo número: 886 entradas diferentes en el blog en 8 meses de vida.
Nuevo record del blog.
El blog de el paseante.
El blog de moda.
El blog de blogs.
Blog extreme.
Siempre a tu servicio.
Más de 13.000 visitas desde más de 30 países diferentes. 

Y más de 886 entradas a tu disposición.
No te pierdas ninguna.
Te están esperando!!!!!!!!!!!!!!!!!

el paseante agradecido


Ser un icono: Robert Capa.


Robert Capa, La muerte de un miliciano.

La foto titulada La muerte de un miliciano (originalmente Death of a Loyalist Soldier, 1936) es la más famosa de las realizadas por Robert Capa durante la Guerra Civil española y posiblemente la mejor fotografía bélica de todos los tiempos. La cámara capta el instante preciso en que una bala alcanza mortalmente a un soldado republicano.
Desde su publicación, la controversia sobre la impresionante fotografía no dejó de aumentar y se han formulado diversas teorías a favor o en contra de su autenticidad. ¿Es una verdadera instantánea o se trata más bien de un hábil fotomontaje? En cualquier caso, no vamos a presentar aquí las razones o argumentos que sostienen ambos puntos de vista.
Es evidente que si aceptamos la segunda hipótesis, la imagen pierde por completo su interés y deja de ser un motivo emblemático de la contienda española. Desaparece en el acto la visión directa de la muerte y se desvaloriza el poder ideológico de la escena: la lucha del pueblo español contra el fascismo y la defensa del orden republicano. También se debilita hasta la elipsis la referencia al marco histórico: la batalla del Cerro Muriano, en el frente de Córdoba, librada el 5 de septiembre de 1936; incluso se pierde en el anonimato la identidad del combatiente: Federico Borrell García, militante anarquista de la CNT, natural de Alcoy, apodado “Taino”, que tenía 25 años en ese momento. Lo cierto es que la hora, el día y las circunstancias de su muerte fueron confirmadas más tarde, aunque con total certeza, por su familia. La fotografía es un triste presagio y un símbolo del drama irreparable que se inició con la sublevación del ejército contra la segunda República. 
Se publicó por primera vez el 23 de septiembre de 1936 en la revista francesa Vu y el pie decía lo siguiente: "De repente, el avance del soldado fue interrumpido, una bala silbó y su sangre fue derramada en el suelo natal".
En la fotografía, el miliciano, solo, sin nadie a la vista, cae fulminado (aunque sin pruebas de bala) hacia atrás por un disparo inesperado; en el momento del impacto tiene el brazo derecho alejado del cuerpo y la mano deja caer blandamente el fusil. La expresión de su rostro refleja la verdad exacta de lo que está ocurriendo. Por lo demás, el sentido tremendo del cuadro se sostiene a sí mismo y excluye cualquier comentario.
Robert Capa, cuyo verdadero nombre era Andre Friedmann (Budapest, 1913 - Vietnam, 1954), cubrió con su Laica II, además de la Guerra Civil española, numerosos conflictos bélicos. Son imprescindibles, por ejemplo, sus fotos del desembarco de Normandía en la II Guerra Mundial... El 25 de mayo de 1954, durante la Primera Guerra de Indochina, pisó una mina que acabó con su vida mientras empuñaba su cámara.
Rodolfo López Isern

miércoles, 16 de mayo de 2012


El blog y el psicoanálisis (3). Actualizado.


Mr. Allen: ¿Y ahora qué pasa Joseeeeeeeeeé Ramón?
Mr. Paseante: No te enfades conmigo Woody, creí que podíamos hablar, creí que éramos amigos, dime si me equivoco.
Mr. Allen: No, no, no te equivocas, pero dime qué quieres.
Mr. Paseante: Hablar, Woody, sólo quiero hablar.
Mr. Allen: Adelante JR, soy todo oídos.
Mr. Paseante: Verás Woody es que la situación está muy mal y estoy muy preocupado, parece como si todo se estuviera viniendo abajo, como si nada tuviera ya sentido, como si todo se fuera a acabar de un día para otro.
Mr. Allen: No seas tan catastrofista por favor, nada se va a acabar y todo va a seguir igual que siempre, estate tranquilo si es sólo eso lo que te preocupa.
Mr. Paseante: Bueno Woody, verás, es que hay más, mucho más...
Mr. Allen: De qué se trata? No me dejes así, dímelo por favor, el que se pone nervioso ahora soy yo, no puedo evitarlo, no me dejes a medias. Qué pasa? Hay algo que debiera saber y no sé?
Mr. Paseante: No creo que deba decírtelo, tal vez sean locuras mías, pero no puedo dejar de preocuparme por algo que veo de difícil solución, o mejor dicho de solución imposible.
Mr. Allen: Quieres decírmelo ya, por favor, no me tengas así, estoy en ascuas.
Mr. Paseante: No puedo Woody, te juro que no puedo, y si pudiera te lo diría, pero no debo decírselo a nadie, es muy complicado de explicar y además podría tener consecuencias nefastas.
Mr. Allen: Ah, ya comprendo, lo único que estás tratando es de excitar mi curiosidad y nada más, en realidad no hay nada detrás de todo este numerito, es otro de tus montajes para llamar la atención y sentirte querido.
Mr. Paseante: Que no Woody, te lo juro, hay algo y es muy grave.
Mr. Allen: pues si quieres decírmelo bien, y si no déjame en paz y no me molestes.
Mr. Paseante: Está bien Woody, no te enfades, te lo diré.
Mr. Allen: Me lo vas a decir de verdad?
Mr. Paseante: Te lo voy a decir de verdad.
Mr. Allen: Me lo prometes.
Mr. Paseante: Te lo prometo Woody.
Mr. Allen: Pues venga ya, a qué esperas...? Me estás poniendo nervioso...


M.P.: Bueno, Woody, verás, es que creo que soy heterosexual.
M.A.: ¡QUE ERES HOMOSEXUAL!!!!!!!!!!!!
M.P.: No chilles, Woody, que te van a oír, no, no soy homosexual, me has entendido mal, te he dicho que creo que creo que soy heterosexual.
M.A.: Ah, no sé por qué me he confundido, te habré oído mal... Pero entonces JR, ¿qué es lo que te preocupa? Todo el mundo, quiero decir, la mayoría, es heterosexual, es lo más corriente, lo más habitual, ¿cuál es el problema? No lo entiendo.
M.P.: Pues verás, es que me parece, te lo digo con toda sinceridad, una vulgaridad el ser heterosexual, imagínate, si se supone que soy heterosexual tendré que comportarme como ellos, o peor aún, me convertiré en uno de ellos...
M.A.: ¿A qué te refieres?
M.P.: Pues que tendré que, por ejemplo, ver los partidos de fútbol...
M.A.: Qué tontería, hay heterosexuales a los que no les gusta el fútbol, a mí mismo no me gusta, eso que dices me parece muy "tópico", igual que no a todos los homosexuales les gusta la ópera.
M.P.: No lo sé, me da miedo, tengo la impresión de que me voy a convertir en un hincha de fútbol que no hace sino beber cerveza y que se me podrá una tripa enorme.
M.A.: Por favor, qué tontería, debes pensar en positivo, y además no estás todavía seguro de ser totalmente heterosexual, seguramente no será necesario lo del fútbol, te quedarás en un término medio.
M.A.: ¿Y eso en qué consiste? Pues en que seguirás siendo el mismo pero de otra manera.
M.P.: ¿Y de qué manera?
M.A.: No lo sé JR, ya lo irás viendo.
M.P.: Tengo miedo Woody, preferiría seguir siendo asexuado como hasta ahora, te lo digo de verdad, creo que el ser heterosexual no me va a traer sino problemas, lo mismo empieza a gustarme la caza o me convierto en un mujeriego, cualquiera sabe, el ser heterosexual 100% me parece peligrosísimo, conlleva situaciones de riesgo clarísimas.
M.A.: Creo que estás exagerando, es como lo del fútbol y la cerveza, no todos hacen esas cosas.
M.P.: Bueno, me quedo más tranquilo con lo que me dices.
M.A.: Dime, ¿y qué síntomas has notado?
M.P.: Pues básicamente lo he notado en el metro.
M.A.: ¿En el metro?
M.P.: Sí, me he di cuenta que les miraba el culo a las chicas.
M.A.: Pues, sí, es inconfundible, parece que vas a ser heterosexual, ¿y has tenido algún otro síntoma?
M.P.: Sí, lo peor de todo es que creo me he enamorado de una chica.
M.A.: Pero eso es fantástico, enhorabuena, ¿de quién se trata?
M.P.: De una compañera de trabajo.
M.A.: ¿De Nerea?
M.P.: Sí.
M.A.: Me lo figuraba por lo que leía en el blog, ¿y ella está enamorada de ti?
M.P.: Creo que no, me tiene afecto y nos llevamos bien pero nada más, además tiene pareja.
M.A.: Bueno, JR, me tienes a tu disposición, si quieres tener un apoyo psicológico en este difícil trance por el que vas a pasar, cuenta conmigo, yo te ayudaré, desde ya te digo que el mundo de las mujeres no es fácil de entender, que suele haber conflictos, y que lo más duro y arriesgado en tu posible futura heterosexualidad, no es ni el fútbol, ni la cerveza, ni la caza, ni el convertirte en un mujeriego, lo más arriesgado es que te enamores, te lo digo por experiencia...
M.P.: Gracias Woody, tú sí que eres un amigo, dame un abrazo, y muchas gracias por escucharme y tener tanta paciencia conmigo.
M.A.: De nada JR, sabes que en mí tienes un amigo.

(continuará)

La derecha se cree la dueña de la realidad.

Cómic de Robert Crumb.
Bueno, pues así parece, la derecha como siempre, de dueña y señora de la realidad , adueñándose de ella, imponiendo sus normas, organizando la vida a propios y a extraños, y sin pedir opinión en absoluto, la derecha siempre arrogándose para sí el monopolio de la realidad.
Rechazando la realidad tal cual es y queriendo meterla entre cuatro paredes.
Véase, por ejemplo, el tema del matrimonio gay, entre ellos y la Iglesia deciden lo que es un matrimonio, y así de paso siguen monopolizando, dando cédulas de honorabilidad, excluyendo, fastidiando, y lo que es peor, discriminando.
Pero qué más les dará, tanta rigidez y tanto dogmatismo no servirán sino para que antes se rompan totalmente lo moldes, no está el mundo en los tiempos que corren para moldes rígidos, ni encorsetamientos, la gente ya no es tonta ni ignorante, la gente piensa por sí misma, los tiempos del oscurantismo y la represión han terminado.
Pero ellos como si nada, a piñón fijo.
Dale que te dale.
Podría alguien explicarles lo que significa el término "pluralidad", y el término "libertad de elección", me gustaría saber qué pensarían si un buen día llegara al poder un partido que pensara que la unión entre un hombre y una mujer no es digna de llamarse matrimonio ni de generar los mismos derechos y contar con las mismas prerrogativas y protección que el "matrimonio entre personas de mismo sexo", y pretendiera imponerlo así a todos.
Pues pudiera ser.
¿Por qué no?
La gente vota cosas rarísimas en ocasiones y pudiera pasar...
¿Qué harían entonces todas estas mentes biempensantes?
Se rasgarían las vestiduras, seguro.
Pues con ellos no sirve de nada rasgárselas, porque les tenemos muy mal acostumbrados, consentimos como si fueran chaladuras y tonterías propias y exclusivas de ellos, aspectos que, nos afecten más o menos a cada uno, son, sin embargo, sustanciales en una sociedad libre, plural y democrática.
Y de los cuales no deberíamos claudicar jamás. 
Porque por ahí se empieza y no se sabe nunca dónde se acaba.
Nunca llegará ningún partido que prohíba el matrimonio entre personas de distinto sexo, obvio, nadie está tan chalado como ellos para hacer cosas así, sólo ellos..., según parece...

el paseante

Marc Jacobs en el Met.


 
El nuevo éxito de Marc Jacobs
lunes 14/05/2012 EL MUNDO
ARACELI OCAÑA | MADRID
Marc Jacobs, en la fiesta del Met. (FOTO: Gtresonline)
En una gala como la que se celebra anualmente en el Met de Nueva York es difícil destacar: modelos, actrices, cantantes y 'celebrities' en general se ponen sus mejores galas para aparecer en las inevitables listas de las mejor vestidas. Sin embargo, sin ser mujer ni luciendo uno de sus aclamados diseños, Marc Jacobs consiguió convertirse este año en la sensación. Quiso homenajear a Elsa Schiaparelli luciendo un vestido de encaje (y unos calzoncillos blancos más que 'retro') y, al final, su estilismo se convirtió en uno de los más comentados... Y en un éxito de ventas. Lástima que no pertenezca a ninguna de las marcas en las que trabaja (la que lleva su nombre o Louis Vuitton), sino a la colección (masculina) de primavera de Comme des Garçons, porque el vestido, pocos días después, ya se ha agotado.
Sin embargo, y aunque haya perdido su parte del pastel en ese lucrativo negocio, Marc Jacobs no tiene problema en encontrarlo por otro lado. Hace unos días, los empleados de la tienda que el diseñador tiene en el SoHo de Nueva York descubrieron que alguien había dibujado en su fachada: el graffitero francés Kidult había pintado la palabra 'ART' en versión XXL (anteriormente ya había atacado las tiendas de Céline, Hermès o Cartier en París). Posteriormente, Jacobs comenzó su pequeña batalla a través de Twitter, donde hablaba, enigmáticamente, sobre 'Art Jacobs @ Marc Jacobs'.
El asunto no quedó ahí y, tal y como hiciera con el robo que sufrió en Londres el año pasado, decidió sacar partido de la historia lanzando la camiseta de edición limitada 'Art by Art Jacobs', que puede comprarse por un precio de 689 dólares (535 euros) y en la que aparece una foto de la fachada tras el ataque. Un precio más que simbólico ya que con la venta de una sola camiseta ya cubriría los gastos de limpieza del graffiti.
Sin embargo, la historia, lejos de finalizar ahí, se ha convertido en un serial cibernético; ahora es Kidult el que no sólo reconoce la autoría de la pintada sino que ataca al diseñador, respondiendo a sus crípticos mensajes vía Twitter: '??? LET'S PLAY, but we don't play the same rules!' ('??? JUGUEMOS, ¡pero no usamos las mismas reglas!'). Después, usaría las palabras de otro (retuiteándolo) para acusar a Jacobs de hacer dinero a su costa: "El capitalista roba".

Ayer fue San Isidro.

San Isidro Labrador. Iglesia de San isidro. Calle de Toledo. Madrid.
Pues poca cosa sé de él, lo básico siendo madrileño, no me llamo Isidro de casualidad, siendo de Madrid hubiera sido lo propio.
Al parecer estuvo casado con una tal Santa María de la Cabeza, que también era santa, obvio, pero yo no sé bien qué méritos tuvo ella para acceder a la santidad, seguramente fue santa consorte y nada más.
Él muy trabajador no era que digamos, salvo que rezar se considere un trabajo también, porque en lugar de arar los campos de su patrón Iván de Vargas, se dedicaba a rezar todo el tiempo, y entonces sucedía el milagro, los ángeles bajaban del cielo cogían con sus manos la yunta de bueyes, y se ponían arar los campos por él, precioso, como en un cuadro de Giotto.
Y su patrón encantado, pensaba que era de lo más trabajador.
Por cierto, que las huertas de patrón, de Iván de Vargas, estaban a la orilla del Manzanares, donde hoy está la Ermita que tiene fuente de agua bendita y todo.
Y allí está la famosa pradera de San Isidro que pintó reiteradas veces con gran maestría el renombrado pintor Don Francisco de Goya y Lucientes, que además vivía ahí al lado, en la que fue famosa Quinta de Goya.
Mucha historia tiene todo esto y mucha leyenda también.
Al menos es un santo popular porque del pueblo era, labrador a al fin y al cabo, no eligieron a un señorito para santo patrono de Madrid, porque podían haber elegido a Iván de Vargas que menuda paciencia tuvo con San Isidro que era, según parece, un tanto recostado.
Pero rezaba mucho al menos San Isidro.
De la mujer nada sé, salvo que da nombre a una Glorieta de la capital, concurrida y ajetreada, la Glorieta, claro, no va a ser la Santa, en la que creo recordar que antes había un paso elevado de coches horrible, conocido popularmente como scalextric, que ya quitaron.
Cosas de Madrid, de ese Madrid provinciano que aún pervive en sus tradiciones añejas.
Y nada más, la iglesia de San Isidro en la calle de Toledo es una verdadera joya del barroco, recomiendo visitarla, en su interior parece que nos vamos a encontrar a Don Benito Pérez Galdós en misa de 12, que, por cierto, es la misa solemne, misa mayor, la llaman, muy larga pero muy bonita, cantada y con órgano.
Recomiendo también la misa de 12 en la Iglesia de San Isidro, en compañía de Don Benito (que no se os olvide darle la paz).
Y sin más me despido.
La paz os dejo, la paz os doy, queridos feligreses del blog,

el paseante Isidro

martes, 15 de mayo de 2012


How can you do that????????? Madrid directo.

Esto parece como de Aladino y la lámpara maravillosa, y en realidad es Madrid directo de nuevo, el paseante de improvisado reportero gráfico en las calles de Madrid, en concreto en la calle Mayor ayer martes 15 de mayo, festividad de San Isidro, a las 16:14:37 hs.
¡Qué precisión!
La escena tiene lugar delante de la Iglesia de San Ginés, estos dos jóvenes magos, tan ricamente ataviados, escenifican este sorprendente e increíble truco de magia, aparenta ser un milagro sobrenatural.
Claro, era el día de San Isidro, tenía que suceder algún milagro.
El milagro de contemplar cómo la necesidad agudiza el ingenio, la creatividad, la fantasía.
Sorprende la belleza mágica de la escena como de cuento de las mil y una noches, con el fondo de la fachada de la antigua Iglesia y el suelo en cuadrículas como de tablero de ajedrez.
Perfecta composición la de los dos jóvenes.
Me recuerda la imagen a las escenas orientales de los cuadros de Tiziano que se pueden contemplar en el interior de los palacios venecianos.
Rica ornamentación, fantástica imaginación, monumental construcción, fuerza en armonía, precioso colorido.
Mundo ideal, perdido, rescatado momentáneamente por estos dos artistas callejeros de lo inverosímil.
Por cierto, ¿cómo lo harán?
Me pregunto...
Son muy guapos, ¿verdad?
¿Serán hermanos?
La vestimenta es muy rica.
¿Dónde la consguirán?
¿Se la habrán hecho ellos mismos?

el paseante


Homenaje a mi móvil Nokia X2.


Mi modesto móvil Nokia X2, un verdadero prodigio de la tecnología, de la mejor tecnología, fácil de usar, totalmente intuitivo, inmejorable cámara con zoom en enfoque y también para tratamiento de imágenes, con un colorido de imágenes excelente y 5 Mpx, flash integrado.
Cómodo de llevar, agradable al tacto, de una estética muy nórdica, atractiva y sencilla, con la trasera en metal, lo cual le da solidez, con su toque elegante y distinguido en negro y granate.
Buenas prestaciones, acceso a internet (si se desea, claro).
Además no es táctil, una ventaja, al menos para mí.
Lejos de los i-phones, de los smartphones, y de todos esos inventos, mi modesto móvil Nokia X2 es mi mejor aliado a la hora de hacer el blog y de darme inspiración, a través de él, de las imágenes que capta, asimilo ideas, conceptos, pensamientos, reflexiones, que poblarán el blog, y que parten siempre de imágenes que me sorprenden, me hacen pensar, o me fascinan.
Salgo de la caverna de Platón, harto ya de ver sólo sombras, pálidos reflejos de la vida que discurre fuera, salgo al sol, a la ciudad, al campo, a la vida, y tomo fotografías, enfoco y plas, foto tomada, o foto robada, o imagen captada, o pensamiento, reflexión, ensoñación, fantasía, fijada, guardada, que esperará ser rescatada y llevada al blog junto con todos los recuerdos y las ideas que me trae a la imaginación.
Mi móvil Nokia X2, el mejor aliado de la creatividad en mis paseos solitarios por el mundo, por la vida, por Madrid...
Gracias móvil, y gracias Nokia, junto con Blogger habéis hecho posible que el producto diario de mi imaginación, de mi creatividad, de mi pensamiento, se vea en medio mundo.
Las nuevas tecnologías son un prodigio para facilitar la comunicación, darnos a conocer, relacionarnos, y enriquecernos con la sabiduría, los conocimientos y la sensibilidad de los demás.
Repito una vez más, gracias modesto móvil Nokia X2 por tu ayuda, apoyo y lealtad.
Te quiero.
Besos,
el paseante

Palmeras. Pintura y poema.

Palmeras. Óleo sobre lienzo. José Ramón Carballo. Mayo 2012.
La palmera levantina,
la columna que camina.
La palmera... la palmera...

La palmera levantina,
la que otea la marina,
la mediterránea era.

la que atrapa la primera
ráfaga de primavera
la primera golondrina.

La que araña los luceros
y se ciñe los encajes
de las nubes a los zancos datileros.

La que brinda sol en grano al verderol.
La que se arroja de bruces contra el Sol.

El magnífico incensario
que se mece solitario.
La palmera... la palmera...

Al final de una colina,
contra azul extraordinario...
¡la palmera levantina!

La palmera lo primero
que vé el ojo marinero
de los mares de Levante.

La palmera la que encuna
al arcángel de la luna,
¡la palmera de Alicante!

Vedla, fina,
palpitar en el confín.
Vedla, presa, en la retina
de Azorín.

La palmera... la palmera...

Como manos compañeras,
al dejar mis anchos valles
y marchar de una mentira bella en pos, como manos,
desde fondos de horizontes y colinas
me dijeron las palmeras
levantinas,
"¡adiós!"

Miguel Hernández

El cuadro de la semana (repetición). Matisse. Conversación.

Henri Matisse. Conversación.

Parece un cuadro pintado por un niño, y así es, Matisse saca al niño que lleva dentro y lo pone a pintar, eso significa que deja fuera de su pintura todo artificio, todo aprendizaje, toda escuela, toda intención.
Aparece el creador en estado puro y se pone a pintar, y pinta unos cuadros que parecen infantiles porque es la imagen que tenemos de cómo pinta un niño, porque hemos olvidado que no es que un niño pinte así, es que nosotros pintamos así cuando pintamos con el alma que es lo único con lo que saben pintar los niños.
Olvidado todo aprendizje, toda técnica, todo artificio e intención, Matisse se queda a solas consigo mismo y con los colores, los pinceles y el lienzo, y se pone a pintar lo que ve alrrededor, y en el cuadro aparece lo que cualquiera ve, el alma pura y esencial de las cosas, la vida verdadera, la verdad, la esencia de un mundo que despojado de su artificio, de su intención, queda desnudo, puro, esencial, tremendo.
Nos conmociona Matisse porque nos habla al oído el único lenguaje que entendemos, el de la verdad.
Por cierto, me encanta el pijama de rayas, es igual que el que yo me pongo.

Besos,

el paseante

lunes, 14 de mayo de 2012


Hasta el miércoles. Feliz San Isidro.

Soy la sustituta de el paseante.
Administradora de contenidos del blog en su ausencia.
Enorme responsabilidad de transcendencia mundial.
Hoy hemos, precisamente, superado las 13.000 visitas al blog, y desde más de 30 países, como siempre dice el paseante.
Por cierto, que es un genio, a mí me ha cogido de aprendiza y estoy aprendiendo un montón.
Es un tío superculto y superinteresante.
El hombre que cualquier mujer querría tener a su lado, educado, cariñoso, culto, paciente, atractivo, servicial...
Y además tiene un cuerpo que te pasas.
Os he dejado todas las entradas que él programó para estos días.
Espero que os gusten.
Nos vemos el miércoles, bueno yo ya no estaré el miércoles, veréis de nuevo a el paseante.
O a su torso.
¿Qué preferís?
Picarones...

Besos,

Nerea

La película de la semana (repetición). Messidor. Alain Tanner.

No recuerdo apenas nada, salvo que es una de las películas fundamentales de mi vida, puede sonar absurdo, es decir, si no recuerdo apenas nada, entonces, ¿cómo puede ser fundamental en mi vida algo de lo que apenas recuerdo nada?, fácil, porque los hechos fundamentales en la vida no se recuerdan apenas, quedan formando parte de uno para siempre, son uno mismo, no hay distancia suficiente para recordarlos bien, no me puedo recordar a mí mismo tal cual soy ahora, y Messidor es parte de mí, ahora y siempre.
Es parte de mí porque contiene el concepto de libertad que me constituye como persona, sin ese concepto no sería capaz de seguir adelante.
Y ese concepto consiste en la capacidad de mandar todo "al carajo" de un momento para otro, perdón por la expresión, pero es la que más se ciñe a lo que sucede en la película, la protagonista deja todo un buen día, se echa la mochila al hombro y sale a recorrer Francia de norte a sur.
Es otoño, comienzo del otoño, Messidor, la estación de las cosechas del calendario napoleónico, el campo luce espléndido, la fotografía comienza en blanco y negro, y va, poco a poco, tomando color.
Por cierto, el verde de los prados se ve más verde en blanco y negro que en color, curioso, porque se ve con la imaginación, y no hay nada superior a lo imaginado.
Recorre Francia a pie de norte a sur, cruzando los campos a través el país. Sólo se escucha la voz de sus pensamientos.
Yo recorrí en una ocasión Francia en sentido inverso, pero no a pie sino en un cuatrimotor que apenas podía elevarse del suelo, salimos de Madrid al atardecer y según sobrevolábamos Francia iba cayendo la noche, parecía que podía tocar la copa de los árboles con la mano.
Recuerdo que una vez leí que Polanski de niño, cuando fue liberado por los aliados del campo de concentración donde habían matado a toda su familia, no comprendió lo que sucedía y al abrirse las puertas salió y se puso andar, igual que la protagonista de Messidor, y cruzó caminando Polonia de norte a sur.
Curioso, en ese viaje en el desportillado cuatrimotor, que apenas volaba sobre Francia, yo me dirigía a Polonia, corría el año 1976.
"No sé si estoy peor o mejor que nunca antes he estado en mi vida".
Eso se dice a sí misma la protagonista en el atardecer de su primera jornada de libertad, recostada debajo de un enorme alcornoque.
Ésa es, pienso, la esencia de la libertad, no saber si uno está mejor o peor que nunca...
Perdonar la licencia memorística que me he tomado, pero creo que esto explica mejor lo que representa esta película para mí que cualquier otra cosa que pudiera decir.
Por todas estas pequeñas cosas esta película es parte de mí.
Por eso y por la posibilidad que uno tiene siempre de mandar todo "al carajo" cuando quiera.
Con perdón.
Por cierto, el director es Alain Tanner.
Besos,
el paseante

Estoy cabreado.


Yo no estoy cabreado, es mi gato el que está cabreado.
No hay más que verle la cara.
Y cuando se cabrea se pone a maullar desaforadamente.
Y luego se sube a su sitio favorito, encima del mostrador de la cocina, justo al lado de los botes de las especias.
¿Será que el olor de las especias le embriaga?
No lo sé, y tampoco sé por qué se ha cabreado, él es así, de vez en cuando se cabrea, es un poco ciclotímico, yo pienso, pero como no habla tampoco le puedo hacer terapia.
A veces le pregunto:
Pero Pipi, ¿qué te pasa?
Y él me contesta:
Miau.
Y ya está, mi gato es de pocas palabras y de muchos miaus.
Hay noches que no me deja dormir, se pone a maullar de madrugada, menudo número, y es que maúlla en estereofónico, menudos pulmones que tiene mi gato.
Y tengo que levantarme a perseguirle por toda la casa zapatilla en mano para que se calle.
El gato y yo corriendo por la casa a las tantas de la madrugada, vaya par de locos, cualquiera que nos viera...
De momento los vecinos no dicen nada, pero deben estar un poco hartos del gato y de mí.
Seguro, no dicen nada por prudencia.
Cualquiera se enfrenta a semejante para de locos...

el paseante

El paseante contracultural.

¿Son los niños Jesús de la Plaza Mayor contraculturales?, me pregunto.
Y me constesto que la España en la que no eran contraculturales los niños Jesús de la Plaza Mayor no existe hace mucho tiempo.
Por tanto, concluyo que sí lo son, los niños Jesús de la Plaza Mayor son contraculturales, en tanto están permanentemente fuera de contexto en la España actual.
Buena prueba de ello es el impacto visual que tiene la foto, atípica hoy en día totalmente.
Los niños Jesús de la Plaza Mayor son la delicia de los turistas, el escaparate en el que están debe ser el más fotografiado de todo Madrid, son una atracción turística más, delante de la cual paran los guías turísticos a los grupos para explicarles en foráneas lenguas qué es aquello.
Yo tuve un niño Jesús de estos en mi casa, bueno, en realidad no era mío, era de mi madre que lo heredó de su hermana, mi tía Carmen, mi tía lo tenía en una consola en el recibidor de su casa, bajo un espejo de repujado marco de madera negra a juego con la consola sobre la que estaba, reposando en sobre su inmaculado mármol blanco, siempre muy frío.
El niño Jesús en aquellos lejanos días de mi infancia no era aún contracultural, era frecuente que lo tuvieran en las casas a la entrada, como queriendo invocar su protección.
El niño Jesús que mi madre heredó de mi tía y que yo heredé de mi madre ya no lo tengo, era hermoso, una imagen antigua muy bien hecha, mi tía siempre decía que no había un niño Jesús tan guapo como el suyo, y mi madre le daba siempre la razón.
No lo tengo porque una navidad que mi madre estuvo en casa lo vió y se lo llevó, una pena porque me quedaba de maravilla sobre un buró estilo inglés en caoba oscura que tengo a la entrada del salón.
El resultado es que ella no lo luce nada, porque sólo lo saca por navidad, y el pobre niño no puede lucir su hermosura durante todo el año como hacía en mi casa y en la de mi tía.
Una pena.
Lo del niño Jesús recibiendo a las visitas sonriente desde su cunita de madera y paja, con su corona dorada y su sonrisita y sus piececitos al aire, era una tradición que yo quería recuperar, viviendo en una casa del Madrid antiguo me parecía que encajaba bastante bien.
En ocasiones le encendía un farolito con velita de Ikea que tenía al lado, modernidad y tradición hermanadas en mi hogar..., precioso.
La tradición de los niños Jesús en los hogares de la postguerra es paralela a la famosa frase que se oía antes de abrir las puertas de las casas:
Ave María purísima.
Y se contestaba:
Sin pecado concebida.
Recuerdo que cuando veraneábamos en Guadarrama me llevaba mi abuela a visitar a su anciana amiga Catalina que vivía a la entrada del pueblo en una casita de piedra como de cuento, con un jardincillo a la entrada lleno de olorosas rosas que ella misma cultivaba.
Al llegar a la puerta y pararnos antes de llamar, yo le decía a mi abuela:
Pero déjame decirlo a mí.
Catalina tardaba en llegar al otro lado de la puerta, cuando al fin llegaba se oía en un hilo de voz:
Ave María Purísima.
Y mi abuela me daba un codazo porque yo generalmente no lo oía.
Entonces yo decía:
Sin pecado concebida.
Pero Catalina no abría.
Y mi abuela me decía:
Dilo más fuerte que no te oye.
Y yo tronaba:
SIN PECADO CONCEBIDA!!!!!!!!!!!
Y Catalina abría la cueva de Aladino y pasábamos.
Yo no quería besar a Catalina porque pinchaba, tenía unas verrugas en la cara con unos pelos puntiagudos como agujas.
Pero mi abuela insistía:
Anda niño, dale un beso a Catalina.
Por lo demás la viejecita era adorable, siempre me daba galletas con moscatel, una delicia.
Siempre que mi abuela me decía que íbamos a visitar a Catalina yo le decía lo mismo:
Pero no quiero besarla que pincha.
Pero al final siempre me tocaba besarla.
Los niños Jesús de las casas también se besaban igual que a Catalina.
Ambos eran santos y venerables.
Qué tiempos aquellos!!!!!!
Parece que fue ayer!!!!!!

el paseante

Arroz con carabineros. Receta.


El sábado hice de comida arroz con carabineros, los carabineros los compré en mi marisquería favorita de la que ya os he hablado en otra ocasión, se trata de Mariscos Castellanos, en la calle Maldonadas, al lado de Latina, dos carabineros congelados 6,50 euros, es difícil encontrarlos salvo que sean congelados porque es un marisco que se estropea enseguida, igual que el gambón, es muy perecedero, y además al ser muy caro se vende poco, con lo cual suelen tenerlo congelado, los de esta marisquería son excelentes.
Los descongelé en agua fría, nunca descongeléis un marisco en agua tibia o caliente, se estropearía.

Receta para dos personas

Se pone en una paellera pequeña aceite virgen extra, yo uso Coosur Picual sabor intenso, se trocea cebolla y se pone a freír a fuego medio, cuando empieza a estar dorada se añaden los dos carabineros previamente descongelados, y se sofríen junto con la cebolla, se les echa sal por encima y se les va dando la vuelta hasta que están dorados.
A continuación se retiran los carabineros y en el aceite con la cebolla de la paellera se sofríe el arroz, imprescindible que sea un arroz tipo Sos, nunca arroz de otro tipo, para dos personas tazón y medio de los de desayuno es la medida apropiada, se sofríe el arroz hasta que está impregnado bien del aceite y mezclado con la cebolla durante unos momentos, sin parar de moverlo para que no se queme ni se agarre.
Una vez que se ha sofrito el arroz se añade el doble de agua que la cantidad de arroz que se echó, en este caso se añadirían tres tazones de desayuno de agua.
Se remueve, se echa un chorro abundante de tomate frito, sal al gusto, preparado de especias para paella y colorante, se remueve todo bien.
Se añade pimiento rojo de lata cortado en tiras y guisantes, no mucho para no restar sabor a los carabineros, se remueve todo bien.
El fuego siempre tiene que estar constante en intensidad desde el principio, yo lo pongo en el 8, y uso vitrocerámica en el fuego grande, una vez removido todo se colocan los dos carabineros y los tres espárragos trigueros frescos según se ve en la foto de arriba.
Los carabineros deben estar bien sumergidos en el caldo para que suelten bien todo su sabor.
Se deja hervir a fuego abierto, no poner campana de cristal o tapa nunca,
Cuando el caldo va mermando, y antes de que se seque del todo, se retira del fuego la paellera y se cubre con un trapo de cocina, se deja posar durante 10 minutos de esta manera.
Destapar y servir.
Si se quiere puede acompañarse de mayonesa, pero queda tan delicioso el arroz con el sabor a carabineros, y tan gustoso, que al final suele no ser necesaria.
No os doy la receta de la mayonesa porque supongo que la sabréis hacer, no utilicéis con este arroz mayonesa de bote, sería un sacrilegio.
El arroz con carabineros con la receta de el paseante queda delicioso, os lo aseguro, fácil y rápido de preparar, vistoso, gustoso y muy rico.
Y sano, muy sano, sin colesterol ni grasas.
Ya me diréis qué tal os sale.

Abrazos,

el paseante cocinero

p.d.- ah, y que no se os olvide comeros el carabinero, claro...