lunes, 14 de marzo de 2016

1 - LA ROMÁNTICA LUNA (poemas 1 A 10).




257 - Tu recuerdo

Saber que adonde vaya
Allí estará él
Oscuro, impenetrable
Mirándome
Como diciéndome
No te olvido


258 - Alguien

Alguien que me mire y me vea
Para quién yo sea lo más importante
Alguien que me dé su amor por nada
Y llene para mí todo el mundo con su amor
Alguien que me hable al oído con palabras llenas de emoción
Y que me bese con pasión
Alguien junto al cual el tiempo no exista
Y las palabras no digan nada
Alguien cuya sola presencia me haga sentir feliz
Y ver el mundo a través de la belleza
De la verdad
Del amor
Alguien, ese alguien que tal vez un día llegará


259 - Galilea

Los caminos de mi pueblo
Me recuerdan los de una Galilea
Soñada por mí
Siento que Jesús se va a cruzar conmigo
En cualquier momento
Y me va a bendecir y a besar
Antes de que vuelva a partir
A cruzar huertos cargados de frutos
Con árboles llenos de pájaros cantores
Bosques y ríos como el santo Jordán
En el cual imagino que encontraré al Bautista
Que me dará su bautismo de amor fraternal
Y llegaré a templos olvidados de siglos de devoción
Y en sus naves vacías volveré a respirar la santidad
Que allí quedó esperándome
Y cruzaré verdes campos para llegar hasta lagos inmensos
En los que mi alma al fin se remanse como un agua transparente
Para siempre tranquila y feliz
En el recuerdo de esa Galilea
Soñada por mí


260 - A la luna perdida

No te oigo ya apenas
Tan lejos te fuiste
Que tu eco se apaga en la lejanía
Como una distante estrella
Que por el cielo brillara perdida
Sin que nadie quiera encontrarla ya nunca
Salvo mi nostálgico recuerdo de ti
Que te piensa
Y no te encuentra
Y te espera
Hasta perderte para siempre ya


261 - Y en un silencio eterno

Y en un silencio eterno
Parece que los sonidos me persiguen
Pero yo no los oigo
Suenan a mi alrededor imperceptibles
Allí están diciéndome algo siempre
Un mensaje tal vez que yo no comprendo
Indescifrables suenan en torno a mí
Revolotean, van y vuelven una y otra vez
Sin que yo repare en ellos nunca
Pendiente como estoy siempre del murmullo de mi voz
De una voz que siempre habla desde mí
A veces hacia dentro la escucho
Pero no siempre
Y cuando hacia fuera habla
No me parece oírla sino dicha por otro
Por otro que no soy yo
Y en ese incesante murmurar
Mi vida va fluyendo como un torrente
Que a veces remansa su agua
Y a veces cae en ruidosa cascada
Catarata de mi vida que siempre chapotea
Por entre las salpicaduras de la dicha y el desconsuelo


262 - Reposa en mí algo

Reposa en mí algo que no soy yo
Que no considero que sea yo
Como un inquilino que me habita
Y llena el espacio de mi vida
De mi tiempo
Y me habla de mí sin que yo le escuche
Y pacientemente sigue en mí a mi lado
Sonriente me mira
Como feliz de estar conmigo
Pero yo le ignoro porque siempre está ahí
Ya habrá tiempo de escucharle
Me digo
Sin saber que el día que decida al fin hacerlo
Tal vez se haya marchado
Y entonces me daré cuenta al fin
De que ese inquilino era en realidad yo
Alguien al que nunca llegué a conocer


263 - Y en la noche viajo

Y en la noche viajo
Como por un mundo fantástico
De sueños imposibles que me hablan de mí
De un yo desconocido que es sin embargo yo
Más yo que yo mismo
Un yo idealizado, como un personaje de película
Que interpretara el papel de su propia vida
Y se la inventara según la va viviendo
Y en la noche sueño
Dulces romances de vida
Eternos y brillantes momentos de alegría
De una dicha plena recuerdo de la que un día viví
Y en noche escucho, todo su silencio
Un silencio que cae desde las estrellas
Como una catarata de amor
Que me impregna de futuro
De un futuro que es también pasado
De un futuro que es por siempre eternidad


264 - Y en el silencio habito

Y en el silencio habito
Como un ave que olvidó su canto
En el silencio escucho
El callado canto de mi alma
Que me enamora con sus suaves acordes
Llenos de una dulce hermosura
Cuyo esplendor me eleva
Me hace volar por entre la vida
Que silenciosa parece quererme escuchar también
Y yo la hablo en mi lenguaje mudo
Lleno de palabras no dichas
De frases no pronunciadas
De ideas que se desvanecen entes de existir
Y en mi centro reposa un agua clara
Como de un manantial eterno
Que remansa mi espíritu
Y me hace feliz


265 - Pinocho

No soy tu mirada
Ni en tus labios me encuentro
No soy tu voz
Ni en tu piel me acaricio
No tengo la paz de tu alma
Ni la dicha de tu sonrisa
No tengo tu amor
Pero, no obstante, te quiero
Escribo sobre ti poemas
Que pretenden ser tú
Sin llegar a serlo nunca
Tarea imposible llegar a ser tú
Que ni tú mismo consigues a veces
Y en ese fracaso yo te construyo
Marioneta inventada
Que camina sujeta
Por las cuerdas de mi imaginación
Con un corazón de madera


266 - Deseos cumplidos

Un deseo nunca puede llegar a cumplirse
Ser deseo y cumplirse son dos cosas incompatibles
En cuanto se cumple un deseo deja de serlo
Sólo es pues deseo en tanto que permanezca incumplido
El cumplimiento de un deseo no es que defraude
No
Es simplemente que dejamos de desear
De imaginar pues
Y vemos al fin la realidad que siega nuestra ilusión
Con su inmisericorde cumplimiento
Con su eterna carga de lógica
Con su impenitente aburrimiento
Y su infinita monotonía
De cosa que se repite hasta la extenuación


La romántica luna (poemas 1 a 10)
José Ramón Carballo

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