EL DESAMOR
Ya sabemos lo que es el desamor.
Es desinterés, desilusión. Pero ¿por qué se produce?. Da igual que nos engañemos, que nos engañen o
que veamos al ser amado tal como es, lo que de verdad mata al amor son las
expectativas. Porque pensamos que la otra persona nunca va a cambiar. Esperamos
que siempre sea tan deslumbrante, atenta, refrescante e interesante como el
primer día y cuando deja de serlo nos desenamoramos.
Esperamos, siempre esperamos. Esa
es la palabra clave. Y lo hacemos inconscientemente, tanto que se convierte en
una costumbre y damos por hecho casi todo. Imagínate, Jota, que no tuviéramos
ninguna expectativa sobre nada. ¡Sería fabuloso!. Nos levantaríamos cada día
sorprendidos de estar vivos y viviríamos en un permanente estado de asombro.
Miraríamos a nuestra pareja con ojos nuevos en todo momento y agradeceríamos
cada mínimo detalle que recibiéramos simplemente porque no lo esperábamos…
Pero esto es casi imposible. Y
digo casi porque me niego a creer en límites inalterables. Sí, ya sé que soy
una sombra escurridiza y cabezota, pero es que no me gusta desenamorarme…
La sombra del paseante
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